El nuevo impuesto, ¿Una solución o problema?
Para nadie es un secreto que la situación económica venezolana es vulnerable. De hecho, a partir de 2017, Venezuela se enfrentaba a una de las peores crisis económicas de su historia, cuando la hiperinflación obligaba a incrementar el precio de los productos al 100%, al menos cada doce días.
Razón por la que el bolívar perdió catorce ceros, en 2007; época en la que Hugo Chávez era el presidente.
A pesar de que el actual mandatario, Nicolás Maduro, anunció el año pasado que había derrotado la inflación, la realidad es que está muy lejos de lograrlo.
El mes pasado, la inflación se ubicó en 10,5%, cuya acumulación interanual supera el 200%, de acuerdo al Observatorio Venezolano de Finanzas. De igual manera, el Centro Cendas-FVM presentó en su informe más reciente que la canasta básica alimentaria del mes de febrero se situaba en $455, en otras palabras, sesenta y un por ciento más cara que hace 1 año.
El Observatorio de Finanzas señala que una de las razones principales de este incremento se debe a la activación de un tributo que supuestamente generaría amplias posibilidades en los niveles de costos, el cual se denominaría Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF).
Aunque este nuevo decreto tributario que impulsó el régimen de Nicolás Maduro, afectaría las transacciones en monedas extranjeras (igualmente las criptodivisas) que puedan usarse en el país, separadamente del monto. Es decir, los venezolanos tendrían que adicionar un tres por ciento más en sus pagos con divisas, salvo exenciones.
Esta medida buscaría rescatar el bolívar, luego de que se derogara la Ley de Ilícitos Cambiarios, que había legalizado las operaciones en dólares en 2018. Como había adelantado la vicepresidenta, Delsy Rodríguez en diciembre pasado, “El 2022 será el año en que recuperaremos definitivamente nuestra moneda nacional: El bolívar”.
Proyecto que Maduro aprobaría el pasado 28 de marzo, con la entrada en vigencia del Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras, el cual serviría para corregir el impuesto que se creó en 2015 y buscaría reducir las operaciones en dólares, monedas virtuales y otras divisas a través del pago de un excedente por el empleo de estas, impulsando de esta forma “el renacimiento del bolívar”.
Lo cierto es que este plan ha comenzado a generar muchas dudas en los venezolanos.
¿De qué trata este impuesto al dólar?
De acuerdo a lo expresado en la Gaceta Oficial nro. 6687, esta resolución aplicaría a personas jurídicas e instituciones que se consideren “contribuidores especiales”, cuya cuota se ubicaría entre el tres y veinte por ciento. En otras palabras, aquellas personas o entidades que realicen operaciones con divisas extranjeras deben incluir un porcentaje adicional.
Si dicha transacción se hace a través de una institución bancaria, el pago sería entre un dos y ocho por ciento; al tiempo que con personas consideradas “sujetos pasivos especiales” la cuota oscilaría entre el 2% y 8%, con el fin de evitar las operaciones ilícitas.
Sin embargo, se espera que el gobierno de Nicolás Maduro ofrezca más detalles en cuanto a los procesos de aplicación de esta medida. Aunque por el momento, el pago adicional para aquellas transacciones que se realicen con divisas extranjeras se ubicaría en un tres por ciento, hasta que haya un nuevo pronunciamiento por parte del Ejecutivo.
Por medio de las redes sociales, muchos han expresado su descontento ante este nuevo decreto, el cual comparan con el IVA (Impuesto al Valor Agregado).
Aunque algunos expertos, como Luis Vicente León, presidente de Datanálisis, indican que esta nueva ley podría contribuir con el desarrollo del sistema financiero en el territorio nacional.