Islandia declara el estado de emergencia por la erupción del volcán en Grindavik
Autoridades en alerta ante una erupción inminente
Las autoridades de Islandia se encuentran en alerta máxima tras declarar anoche el estado de emergencia debido a la erupción de un volcán cerca de la ciudad de Grindavik, en la península de Reykjanes, costa suroeste de la isla. A diferencia de anteriores erupciones, esta vez no se prevé un cierre del espacio aéreo europeo.
Naturaleza en acción: la erupción y sus antecedentes
La erupción iniciada fue precedida por una serie de terremotos en el cráter de Sundhnjúka, lo que llevó a la evacuación inmediata de la zona. El diario islandés 'Fréttabladid' informó sobre esta actividad volcánica, que ocurre después de una intensa actividad sísmica registrada el mes pasado en la misma área.
La magnitud de la fisura supera a las erupciones anteriores en esta zona, extendiéndose a lo largo de cuatro kilómetros y acercándose considerablemente a áreas pobladas. La erupción ha generado grandes flujos de lava, cuyo curso dependerá de la topografía local, con su extremo norte cerca de Stóra-Skógfell y el sur cerca de Sundhnúk.
Respuesta gubernamental y medidas de seguridad
El presidente de Islandia, Gudni Johannesson, manifestó su preocupación por proteger vidas e infraestructura, cerrando la zona afectada y permaneciendo en alerta ante los fenómenos naturales. Las autoridades, tras la disminución de la actividad sísmica en noviembre, habían levantado el estado de emergencia en Grindavík, pero la erupción ha obligado a reactivar medidas de evacuación y seguridad.
El ministro de Exteriores, Bjarni Benediktsson, confirmó que los vuelos hacia y desde Islandia no se han suspendido, manteniendo el tráfico aéreo internacional abierto. La primera ministra, Katrín Jakobsdóttir, elogió el trabajo de socorristas y científicos que patrullaron la zona en semanas anteriores, resaltando la importancia de la evacuación temprana.
Evaluación de la situación y perspectivas futuras
Según la Oficina Meteorológica de Islandia (IMO), la actividad sísmica se está desplazando hacia el sur, lo que podría expandir la erupción hacia Grindavik. A pesar de ello, se observa una disminución en la intensidad de la erupción inicial al suroeste de Reikiavik. Las autoridades han establecido una zona de seguridad en el área evacuada semanas atrás.
La IMO señala que, aunque la potencia de la erupción y la actividad sísmica están decreciendo, este patrón no indica la duración del fenómeno, sino que podría estar alcanzando un estado de equilibrio. El monitoreo continuo de la actividad volcánica y la comunicación con unidades de protección civil son prioridades.
Naturaleza en acción: la erupción y sus implicaciones
Itahiza Domínguez Cerdeña, sismólogo del Instituto Geográfico Nacional, describe la erupción como fisural basáltica, efusiva y no explosiva. Aunque inicialmente generó fuentes de lava altas, la potencia de la erupción ha disminuido progresivamente.
Desde 2021, la península de Reykjanes ha presenciado múltiples erupciones monogenéticas en áreas poco pobladas. Sin embargo, esta vez, la erupción más al sur plantea riesgos para la planta de energía geotérmica y el pueblo de Grindavik. Los principales peligros incluyen el flujo de lava que puede dañar infraestructuras y la emisión de SO2, aunque su alcance depende de la evolución y duración de la erupción.
Análisis y perspectivas de expertos
Itahiza Domínguez Cerdeña destaca que la erupción actual, a diferencia de la explosiva erupción del Eyjafjallajökull en 2010, no generará grandes cantidades de ceniza, dado que esta erupción es distinta y no se produce bajo un glaciar, lo que amplifica la explosividad.
La incertidumbre persiste sobre la duración y evolución futura de la erupción, con posibles consecuencias en el cierre del espacio aéreo solo en la zona de la península. La evaluación continua de la actividad volcánica y las condiciones climáticas son cruciales para determinar los riesgos a largo plazo.