La revolución del terror: A 50 años del estreno de ''La Masacre De Texas''

El 1 de octubre 1974, un joven director llamado Tobe Hooper estrenó en Austin (Estados Unidos) una película titulada La Masacre De Texas, una cinta que con el paso del tiempo se convirtió en una de las más legendarias del cine de terror.

Con una presentación que muestra un texto en donde un locutor explica que la película está 100% basada en hechos reales, acompañada de flashes de cámara que iluminan unos cadáveres descompuestos, es recordada como una de las más turbias del séptimo arte.

La Masacre De Texas relata la historia de dos hermanos que emprenden un viaje a Texas junto a sus amigos tras haber escuchado por la radio que la tumba de su abuelo había sido profanada.

Cuando se aseguran de que la tumba está en perfecto estado, los jóvenes tratan de buscar combustible para reanudar el viaje de vuelta, lo que les llevará desde la gasolinera local hasta una retirada granja a la que les conduce un extraño y perturbado autoestopista.

Una vez allí, tendrán que lidiar con los miembros de la familia Sawyer, una comuna de asesinos caníbales que no tienen ninguna intención de dejar marchar al grupo de amigos que había iniciado la expedición.

De los integrantes de la familia Sawyer, el más recordado es Leatherface (o Cara De Cuero en español), un hombre que utiliza una máscara hecha con piel humana y que persigue a sus víctimas con una motosierra. En comparación a otros personajes del género slasher, Leatherface se diferencia por su discapacidad intelectual y asesina a sus víctimas por órdenes de sus familiares.

La Masacre De Texas fue una película que despertó polémica por sus escenas de violencia explícita y dio pie a varios análisis por parte de algunos expertos con temáticas referidas al capitalismo, la cadena alimenticia y la política estadounidense.

Fue prohibida en países como Australia y Reino Unido, y luego de su estreno en 1974, sufrió varios cortes. Pero a pesar de estos obstáculos, La Masacre De Texas fue un éxito en Estados Unidos gracias a su estrategia de marketing con el eslogan ‘’basada en hechos reales’’, y aunque pasaron 50 años de estreno, es una cinta que aún pone nervioso al espectador.

ED GEIN, LA FUENTE DE INSPIRACIÓN

A principios de la década del ’70, antes de ser un reconocido director, Tobe Hooper era profesor en la Universidad de Texas en Austin. Cuando no daba clases, Tobe filmaba cortometrajes y tuvo su debut cinematográfico con una película dramática experimental llamada Eggshells, la cual co-escribió con su amigo Kim Henkel. Eggshells contaba la historia de unos hippies que se reúnen en una vieja casa en el bosque en la que, poco a poco, se van congregando una serie de presencias en los aledaños. Aunque la película pasó sin pena ni gloria por algunas salas de cine estudiantiles, Tobe tomó este primer proyecto como ejemplo para pulir su visión artística.

Para su segundo film, Hooper decidió explorar el género de terror y tomar como temática principal el aislamiento social inspirándose en Ed Gein, un asesino en serie de Wisconsin que coleccionaba huesos humanos y realizaba muebles con las pieles de sus víctimas. La impactante historia de Ed Gein sirvió de inspiración para clásicos del terror como Psicosis y El Silencio De Los Inocentes.

Hooper y Henkel también se basaron parcialmente en la vida del criminal Elmer Wayne Henley Jr., quien fue cómplice del asesino, secuestrador y violador de menores Dean Corll durante los tristemente famosos asesinatos en masa de Houston, donde perdieron la vida 28 niños.

Durante la preproducción, La Masacre De Texas se vio envuelta en una intrincada campaña de financiación, en la que Hooper y Henkel fueron vendiendo porcentajes de la futura obra para poder obtener el dinero necesario para poder filmarla. Pese a que el presupuesto inicial era más bajo, la película aumentó su financiación hasta los 140.000 dólares.

El calendario de La Masacre De Texas se ajustó al máximo, rodando todo el filme durante un mes en jornadas de 14 horas al día para abaratar al máximo los costes. El reparto de la película estaba integrado por actores desconocidos, todos ellos intérpretes amateur locales en el momento del rodaje, e incluso algunos de ellos no tenían ninguna experiencia previa en el cine.

UN RODAJE EXTREMO

La Masacre De Texas se rodó en tres ciudades: Austin, Round Rock y Bastrop. Debido al poco tiempo, el rodaje duró cuatro semanas y el equipo de producción trabajó siete días a la semana entre 12 y 16 horas por jornada. Para colmo, las extremas temperaturas dificultaban el proceso de filmación, las cuales llegaban a superar los 35°.

Para el decorado de la casa de la familia Sawyer se utilizaron huesos de animales en descomposición y comida podrida, y debido al calor extremo, el hedor de lugar era insoportable. Esto hizo que algunos miembros del equipo de producción y los actores sufrieran desmayos y vómitos, poniendo en riesgo su estabilidad psicológica durante el rodaje. El actor Edwin Neal, que interpretaba al autoestopista y hermano de Leatherface, Nubbins Sawyer, afirmó: ‘’Fue el peor momento de mi vida’’.

Gunnar Hansen, el actor que interpretó a Leatherface, debía mantener el menor contacto posible con sus compañeros de reparto para crear un auténtico miedo durante la filmación. Gracias a su estatura y masa muscular, Gunnar Hansen interpretó a un escalofriante Leatherface que se volvió un ícono del género slasher.

EL LEGADO DE UN CLÁSICO

La Masacre De Texas fue una película que, junto a Navidades Negras (1974), se convirtió en una de las pioneras del género slasher. Además, fue una de las primeras cintas que le dio cierta identidad a su villano, una fórmula que después adoptaron películas como Viernes 13, Pesadilla y Scream.

La Masacre De Texas fue aclamada por directores como Ridley Scott, y con el paso del tiempo, las generaciones más jóvenes conocieron a Leatherface gracias a sus remakes y secuelas. Pero fue de la mano de Tobe Hooper, hace 50 años, cuando el mundo veía por primera vez las atrocidades de la familia Sawyer para dejar aterrorizados a los asistentes que los vieron en la pantalla grande en el momento de su estreno.