La respiración es algo natural: inhalar, exhalar… no mucho, ¿verdad? Bueno, adivinen qué: en realidad hay una forma incorrecta y correcta de llevar oxígeno a su sistema a través de sus pulmones.
A pesar de que la respiración es el fundamento de la vida, la respiración se puede hacer en muchas formas, e incluso se puede hacer incorrectamente. Al igual que en la vida, la respiración es también la base de una práctica de yoga enriquecedora. Ya sea que practiques en casa o en un estudio, no es mala idea reconocer cómo respirar durante el yoga. Esto no sólo será tan beneficioso para tu práctica, si no también una habilidad que puedes utilizar fuera del mat.
El control de la respiración, o pranayama en sánscrito, es la parte más importante de tu práctica de yoga físico. La respiración fortalece la conexión entre la mente y el cuerpo, promoviendo el equilibrio, el juicio sólido, un estado estable de la mente y un fuerte poder de voluntad.
La respiración también es "muy calmante para la mente", ya que cuando tu mente está corriendo, puedes redirigir tu atención y energía hacia tu respiración
La respiración es "también importante para el sistema respiratorio", ya que el sistema respiratorio "es la puerta de entrada para purificar el cuerpo, la mente y el intelecto".
Mientras que el yoga a menudo se considera una práctica meditativa, al mismo tiempo actúa como un ejercicio de respiración, pero los dos componentes se entrelazan sin problemas para crear la experiencia mente-cuerpo que los yoguis saben y disfrutan. La clave para respirar en yoga,es respirar con intención, con atención plena, y eso se relaciona con el aspecto meditativo. A veces tienes que separarte de tus pensamientos y concentrarte en tu cuerpo para que cuando vuelvas al ajetreo, puedas hacerlo con la cabeza clara. ¿Tiene sentido?
Ahora que tienes una mejor idea de por qué prestar atención a tu respiración es una parte vital del yoga, volvamos a la pregunta de cómo respirar durante el yoga, porque no es tan simple como el patrón estándar de inhalación, exhalar. En realidad hay una serie de técnicas de respiración que los yoguis toman a lo largo de su práctica. Cuando los utilizan en última instancia depende del flujo y las posturas que están realizando.
Existen cinco técnicas de respiración más utilizadas en el yoga: Ujjayi, aliento de león, aliento de fuego, Bhramari y aliento del vientre. Ujjayi es una respiración texturizada y audible en la nariz durante cinco conteos y por la nariz durante cinco cargos. Esta respiración se utiliza para crear calor interior como se puede utilizar en cada pose para obtener más profundidad, firmeza y una sensación de calma. El aliento del león es más feroz, con una profunda inhalación a través de la nariz, y una fuerte exhalación a través de la boca con la lengua sobresaliendo. El aliento del león está destinado a hacerse hasta que estés vacío de aire en el fondo de la exhalación, con el fin de liberar esta energía estancada del cuerpo.
La respiración adecuada comienza en la nariz y luego pasa al estómago a medida que el diafragma se contrae, el abdomen se expande y los pulmones se llenan de aire.
Las bhramari y las respiraciones del vientre son técnicas calmantes. Bhramari se realiza a menudo al principio de la práctica para establecer esa sensación de claridad desde el principio, y requiere que exhales durante el mayor tiempo posible mientras haces un zumbido, casi como una abeja, para que puedas sentir la vibración en todo tu cuerpo. Las respiraciones del vientre se toman a un ritmo más lento, y se pueden tomar en cualquier posición. Por último, el soplo de fuego logra lo contrario. Típicamente realizado en cualquier lugar de 30 a 100 veces seguidas, esta técnica tonifica los abdominales, enciende el sistema digestivo, y crea calor que incluso puede hacerte sudar. La razón por la que la respiración nasal es más eficaz para crear cambios de energía, es que cuando inhala o exhala por la nariz, estimula el nervio olfativo; este impulso se transmite luego al hipotálamo, que está conectado a la glándula pineal, que se asocia con el área del tercer ojo, el asiento del «gurú sat», la sabiduría interna.
Respirar por la derecha tiende a activar el sistema; respirar por la izquierda tiende a calmarlo.