Por Adriana Giannini
Es cierto que todos hemos metido la pata al menos una vez en la vida. Las causas pueden ser generadas por el estrés o por un exceso de sensibilidad al entorno. Otras veces, estamos ensimismados y al no prestar atención a los demás, nos desorientamos cuando tenemos que actuar o responder.
También, están los que parecen destinados a tropezar siempre con la misma piedra y arruinar muchas situaciones. Suelen ser personas que hacen y dicen lo que sienten sin filtro.
Ventajas y desventajas de meter la pata
Muchas personas cuando pasan por situaciones nuevas en las que no están habituadas a comportarse, es cuando reaccionan de modo inoportuno. Lo mismo les ocurre cuando hablan con figuras de autoridad o cuando alguien les gusta.
El caso es que se esfuerzan tanto por caer bien que logran el efecto contrario: estropear el clima en todo lugar donde se mueven.
Aunque hay que decir que muchas veces, algo que empezó como una equivocación, destacó a esa persona del resto he hizo que consiguiera el puesto de trabajo por el que competía o que alguien se fijara en ella, justamente porque su conducta imprevista marcó la diferencia. Así que no siempre les genera desventajas.
Impulso alto y percepción baja propician la metedura de pata
Según los expertos, falta de percepción, poca atención y madurez, y escasa posibilidad de prever las reacciones ajenas, son sus puntos débiles.
En los pequeños resulta adorable verlos “meter la pata” porque es algo espontáneo y causa risa, pero ya de adulto es una tendencia que se quiere corregir. Para lograrlo es necesario entrenar la percepción y entender que esa actitud, aunque a veces los destaque, en la mayoría de los casos los hace muy poco confiables.
Atención con meter la pata en las redes sociales
Las redes nos acompañan en todos los ámbitos y a toda hora. Si no eres de la generación que conoce las redes desde que nacieron, deberías asesorarte bien sobre como comportarte en las distintas webs.
Los metedores de pata crónicos, en este caso también, por desconocimiento, suelen hacer comentarios privados en muros públicos. O se exponen demasiado con sus fotos en sitios que llegan a un público masivo y no toman consciencia de la cantidad de gente a la que se puede llegar por Internet y su actitud suele perjudicarlos laboralmente.
7 claves para dejar de estropear todo
- Frena la conducta impulsiva: Cuando te pregunten algo, tolera la incertidumbre y responde sólo cuando hayan acabado de preguntar. La ansiedad te puede llevar a malograr oportunidades.
- Entrena tus habilidades sociales: Ensaya nuevos comportamientos para relacionarte mejor: escucha con atención, deja de pensar tanto en ti mismo para no desbaratar al entorno.
- Lleva un registro diario de tus despistes: Escribe hora, situación, con quién ha sido, qué es lo que has dicho exactamente y qué reacción se generó en los demás. Y en otra columna, lo que podrías haber dicho o hecho, como conducta alternativa, para no estropear el clima.
- Trabaja la autoestima y la confianza en ti mismo: Descarta los pensamientos negativos y las autocríticas exageradas. Con la constancia, irás viendo los resultados.
- Ejercita la concentración: Trata de hacer una cosa a la vez, pon toda tu atención en ello. Apunta periódicamente tus progresos ya que el hecho de escribirlos, también mejorará tu perfil y tomarás consciencia de cuando "metes a la pata".
- Cuando "metas la pata" reconócelo. No hay nada peor que negar algo tan evidente.
- Demuestra interés en los demás. Préstales atención. No te aísles en una burbuja, así tendrás certeza de cómo comportarte.