Un Fraude Llamado Milli Vanilli

Los 80’s fue una década de esplendor para la música pop con la explosión de los videos en MTV, la estética colorida de los artistas y el auge de los shows en los estadios. La teatralidad y el ritmo de las canciones eran los ingredientes fundamentales para completar la fórmula del éxito y, algunos intérpretes como Madonna y Michael Jackson, llevaron dichos elementos al extremo. 

Pero, ¿qué ocurre cuando unos artistas son unos fraudes? ¿Sus fans los recordarían como unos revolucionarios o como unos traidores? ¿Su música seguiría escuchándose con el paso del tiempo? Para responder a todas esas preguntas, existe un ejemplo muy popular en el mundo de la música, y es el de Milli Vanilli.

El dúo alemán Milli Vanilli, formado en 1987 por Rob Pilatus y Fab Morvan, tenía todo para convertirse en una nueva promesa del pop: Carisma, baile, belleza y estilo. Sus canciones contenían una gran influencia del funk y el R&B, lo cual les permitió captar la atención del público estadounidense, con letras frescas dirigidas al público joven. Pero sólo un grupo de personas conocían la verdad detrás de este producto musical.

El productor Frank Farian, quien se hizo conocido por haber trabajado con el grupo Boney M, tuvo la idea de crear un nuevo proyecto bajo la consigna ‘’boy band para los adolescentes’’. Para esto, recluto a Pilatus y Morvan, quienes eran bailarines de apoyo para otros artistas. Como tarea, los futuros integrantes de Milli Vanilli solo debían bailar y prestar sus rostros para la imagen del grupo, aunque ninguno de los dos podía cantar. Ante esto, Farian busco vocalistas profesionales para simular las voces en las futuras canciones que iban a ser grabadas.

En 1988, Milli Vanilli lanzó su primer sencillo titulado '’Girl, You Know It’s True’’, el cual gozó de gran éxito tanto en Europa como Estados Unidos. Pero, en realidad, esa canción era de un grupo norteamericano llamado Numarx, la cual llego al productor Frank Farian por parte de un DJ y, con la suma de algunos arreglos musicales que le dieron un toque dance-pop, surgió el hit que se conoce hoy en día.

Mientras más grande era el éxito de Milli Vanilli, más difícil era para Farian controlar al dúo debido a las fiestas, los excesos y al escaso compromiso que tenían en su trabajo.  Debido a la popularidad que tenían en Norteamerica, Milli Vanilli se embarcó en una gira por Estados Unidos en 1989, lo cual preocupó a Farian ya que había muchas probabilidades de que el fraude saliera a la luz. Y casi fueron descubiertos en un show que brindaron en Connecticut, donde hubo una falla en el playback de ‘’Girl, You Know It’s True’’, lo cual pasó desapercibido debido a los gritos eufóricos de las fanáticas que sonaban más fuerte que la música.

Por supuesto, lo bueno duró muy poco y en 1990 el fraude de Milli Vanilli fue descubierto debido a las declaraciones de los cantantes que prestaban sus voces en las canciones del dúo y por la confesión de Frank Farian, quien deseaba cortar su relación laboral con los integrantes Pilatus y Morvan debido a sus constantes discusiones. A raíz de esto, la organización de los Grammy les retiró el galardón que habían recibido a Mejor Artista Novel.

Tras el descubrimiento del fraude, Frank Farian dio a conocer a los verdaderos cantantes que prestaban sus voces para Milli Vanilli y decidió impulsar el proyecto titulado The Real Milli Vanilli (en donde ocasionalmente participaba Fab Morvan), pero no tuvieron éxito y su poca popularidad quedó estancada en Europa.

Los dos ex-integrantes de Milli Vanilli, por más que intentaron volver al mundo de la música como dúo, no lo lograron ya que su reputación estaba manchada. Tal fue la carga de este desagradable hecho para Rob Pilatus que, tras cometer varios delitos de vandalismo  y caer en una adicción a las drogas, intentó quitarse la vida. Pero no sería hasta 2002 cuando, después de haber hecho las paces con Frank Farian y de programar un regreso para Milli Vanilli, Pilatus fue encontrado muerto en un hotel a raíz de una sobredosis.

El mundo del pop mostró su faceta más oscura con la historia de Milli Vanilli y, al igual que en cualquier empresa, demostró que lo más importante es sumar dinero, sin importar las consecuencias.

‘’Milli Vanilli tiene más talento que Bob Dylan, Paul McCartney y Mick Jagger’’, dijo Rob Pilatus en una entrevista, lo que da paso a la siguiente cuestión: Por más que sea un fraude, ¿puede un producto musical considerarse talentoso solo porque marco una época determinada?